En nuestro artículo anterior vimos de que se trata la bronquitis infantil y las principales causas para que esta enfermedad pueda aparecer (click acá para leer el artículo). A continuación vamos a hablar un poco sobre los tratamientos para la bronquitis infantil, recalcando que nunca se debe hacer caso a cualquier posible remedio casero, sino que siempre se deberá consultar a un médico en el menor tiempo posible.
Posibles tratamientos para la bronquitis infantil
Lo primero que hace el especialista es una evaluación en el pequeño para poder determinar el avance de la enfermedad. Luego el médico decidirá el plan de tratamiento dependiendo del tipo de infección responsable de causar la bronquitis infantil. En caso de una infección bacteriana, el médico puede recetar antibióticos para aliviar los síntomas. Sin embargo, como una infección viral no se puede tratar con antibióticos, la mejor opción sería la de tomar ciertas precauciones para aliviar los síntomas. Usted deberá tomar atenta nota a todas las indicaciones dadas por el médico tratante.
También hay algunos cuidados que son complementarios a los tratamientos para la bronquitis infantil. Antes que nada asegúrese de que la habitación esté bien ventilada. La instalación de un humidificador también ayudará a mantener el aire húmedo, ya que respirar el aire húmedo en los pulmones inflamados puede proporcionar una cantidad sustancial de alivio.
Alimentar al bebé con muchos líquidos puede ayudar a aflojar el moco, por lo que es más fácil de eliminar a través de la tos. Usando gotas de solución salina después de la consulta con un médico también es útil para aliviar la congestión del pecho (recuerde comprar solo las que le ha recetado el doc tor). Si el bebé todavía está siendo amamantado, tenga en cuenta que la leche materna es de gran ayuda para el sistema inmunológico.
Recuerde que la bronquitis es una enfermedad respiratoria grave y por lo tanto el tratamiento médico urgente es esencial para mantener la salud del bebé bajo control y evitar mayores complicaciones, como la neumonía o insuficiencia respiratoria.
NOTA IMPORTANTE: La información proporcionada en este artículo es sólo para educar al lector. No pretende ser un sustituto del consejo de un médico especialista.