Cuando un niño comienza a evidenciar malos resultados en la escuela, no siempre se encuentra vinculado con su conducta, o con que está más o menos concentrado. En algunas ocasiones el síntoma más claro de que nuestro hijo pude presentar algún trastorno de aprendizaje es la dislexia o la disgrafía.
Lo fundamental en estas circunstancias es descubrir cuanto antes si el bajo rendimiento escolar del niño es un resultado de alguna dificultad mayor como un trastorno de aprendizaje. Si deseas conocer a qué señales debes estar atento para identificar si tu hijo sufre alguno, te presentamos una claves sugeridas por los especialistas de Innea.
¿Cómo identificar un trastorno de aprendizaje en tu hijo?
Estos son algunos de los síntomas más claros de que nuestro hijo presenta alguna clase de inconveniente en el aprendizaje:
1. Si observas que tu hijo por lo general cuenta con los dedos, colaborale para fortalecer el cálculo mental propiciando actividades que lo obliguen a calcular, por ejemplo, la devuelta de la compra del supermercado. Si con el transcurrir del tiempo no mejora y, además, no tiene claro los signos matemáticos, es posible que tenga una dificultad como la discalcúlia.
2. ¿Tu niño presenta inconvenientes para deletrear palabras? , es importante que le solicites que deletree palabras de 8 letras, luego de 7 y así sucesivamente. Si observas que le cuesta demasiado, que tampoco se atreve a leer en voz alta y que confunde especificas letras al leer, es factible que consista en un trastorno de dislexia.
3. ¿Notas que tu hijo no te hace caso y repite con frecuencia un comportamiento aunque le hayas llamado la atención?, ¿Carece de concentración en una tarea y no piensa antes de actuar?, con seguridad son señales de un TDAH sin diagnosticar, lo mejor es que busques ayuda con un especialista para tratar su caso de modo multidisciplinar y contribuir de manera eficiente en el control de sus impulsos.
4. Aunque se descubran síntomas de dislexia o disgrafía, no te angusties si todavía no posee 8 años, porque a esa edad puede ser normal que les cueste porque se encuentran aprendiendo a leer y a escribir. No obstante, si observas que se hace mayor y continúa confundiendo letras y números, es posible que esté sufriendo de alguno de estos trastornos.