Los niños por lo general son alérgicos al polen. Esta clase de alergia aparece en los meses de primavera y verano, normalmente, cuando las plantas florecen y sueltan los granos de polen que generan la respuesta negativa en los menores.
En esta clase de alergia presenta gran influencia en las regiones donde predomina el clima de invierno. Si en un año los meses han sido fríos y lluviosos, incrementará el número de plantas y la cantidad de polen, así que de esta manera la primavera resultará fuerte para las personas alérgicas a esta clase de elementos que se liberan en el aire.
¿Cuáles son los síntomas de la alergia al polen?
Los síntomas de esta clase de alergia son diversos. Lo más común es que provoque goteo nasal y escozor en la nariz unido a constantes estornudos y ojos irritados. En las situaciones más extremas, es posible que se produzca conjuntivitis y asma bronquial o inconvenientes para respirar.
Para identificar si el menor es alérgico al polen, lo mejor es llevar a cabo varias pruebas cutáneas. Estos exámenes tratan de inocular sobre la piel distintas clases de polen y mirar cuales son las que generan la reacción.
Prevención ante la alergia al polen
La mejor forma de prevenir la alergia al polen es evitando estar cerca de estas sustancias o componentes de la naturaleza. Estos son algunos de los consejos preventivos por los especialistas en el tema:
1. Evitar salir a la carretera o al campo, en especial si se presenta un día caluroso o con viento, escenario perfecto en la que la cantidad de polen se incrementa.
2. Cerrar las ventanas de la habitación y del auto en especial entre la una y las ocho de la madrugada, que es cuando se presenta el mayor número de polen al aire libre.
3. Emplear sistemas de aire acondicionado que disminuyan las partículas de polen.
4. No secar la ropa al exterior.
5. Evitar estar durante mucho tiempo en lugares cerrados.
6. Alejarse del humo del tabaco, gasolina, atomizadores entre otras sustancias irritantes.
7. Llevar una higiene apropiada de las fosas nasales utilizando suero fisiológico o agua de mar isotónica.
8. El tratamiento más normal es ingerir antihistamínicos y descongestionantes nasales. Por otro lado hay además vacunas que ayudan a reducir los síntomas de esta alergia.