La mayoría de los padres desean que sus hijos sean obedientes y disciplinados. Para esto es necesario que los adultos transmitan una buena educación y formación en valores a través del ejemplo. Los padres son los principales responsables de hacer comprender a los niños que existen normas que cumplir e informarlos sobre cuáles son.
Cuando los niños revelan falta de respeto, mala conducta y desobediencia es porque los padres están fallando en algo dentro de la formación, ya sea en el manejo de la autoridad, la disciplina o el mismo ejemplo que éstos transmiten mediante sus comportamientos.
¿Qué errores cometen los padres frente a la mala conducta de sus hijos?
1. Formación negativa: los padres caen con frecuencia en el error de decirles a sus hijos la palabra ‘no’ en múltiples ocasiones: ‘No tomes eso, no veas eso, no hagas eso, no, no, no…’ Se transmite tantas veces la negación que los hijos generan una especie de inmunidad y esto no influye para nada en su comportamiento, por el contrario parece afianzarlo. Los psicólogos aconsejan la formación por medio del refuerzo positivo, esto significa, modificar el mensaje anterior por ‘puedes realizar mejor la tarea, te ves mejor cuando eres amable…’.
2. Se suministran ordenes vagas: no es recomendable utilizar expresiones como ‘pórtate bien’ o ‘debes ser bueno’ ya que éstas no le aportan ninguna clase de información a los menores. Los padres deben procurar por ser más específicos para que los hijos sepan lo que esperan de ellos. Por ejemplo, ‘recuerda no dejar la basura en el piso’ o ‘es importante recoger los juguetes’.
3. No saber ejercer la autoridad: por lo general los padres suelen perder la paciencia cuando discuten con sus hijos y comienzan a gritar o por el contrario se extralimitan en el manejo de la autoridad siendo demasiado severos en algunas ocasiones que no lo requieren. Es más conveniente que los padres aprendan a controlar sus emociones y empleen bien la firmeza y la seguridad. Es importante recordar que los niños imitan de sus padres la mayoría de las conductas que observan en ellos.
4. Dar mal ejemplo: los menores son muy inteligentes y contemplan todo aquello que los rodea. Por eso cada comportamiento o actitud de los padres es asimilado por los niños. Si la conducta de los padres revela irrespeto e indisciplina cómo pretenden los padres que sus hijos sean respetuosos y disciplinados.
5. Sobran las explicaciones: es importante que los padres incluyan dentro de la formación y la autoridad, la comunicación con sus hijos que les permita explicarles a éstos cómo deben comportarse y por qué deben hacerlo de esa manera.