La lactancia es el término biológico usado para la producción de leche materna. Cuando el bebé succiona en el pecho, unos estímulos nerviosos se envían desde las células receptoras especiales situados en la mama hasta el hipotálamo, que se encuentra en el cerebro. El hipotálamo es estimulado para activar la glándula pituitaria Ninto, generando la producción de dos hormonas diferentes.
Estas hormonas se llaman oxitocina y la prolactina. La hormona llamada oxitocina se almacena en la glándula pituitaria y actúa sobre las células musculares. Estos músculos rodean las glándulas en dónde se produce la leche. La oxitocina hace que las células de los músculos se contraigan a su vez, enviando la leche de las glándulas a los conductos.
La prolactina es la segunda hormona que está implicada en el proceso de la lactancia. La prolactina también es producida por la glándula pituitaria y se libera en el torrente sanguíneo cada vez que el bebé succiona en el pecho. Cuando la prolactina se libera en el torrente sanguíneo, viaja a las glándulas productoras de leche en la mama y estimula las glándulas para producir la leche. El nivel de prolactina aumenta en la madre durante el embarazo, pero la producción de leche es suprimida por otra hormona, la progesterona, hasta que su nivel disminuye después del nacimiento.
La oxitocina provoca lo que se conoce y se refiere como el «eyección baja» de la leche en las glándulas. Esto provoca diferentes sensaciones en distintas madres. Algunas reportan dolores punzantes, mientras que otras reportan una sensación de hormigueo. Muchas otras dicen que nunca tienen sensación alguna.
Después de este proceso, la leche se transfiere entonces desde el pecho al bebé por una combinación de dos procesos:
- Expulsión de leche activa de la madre debido al reflejo de eyección baja
- Eliminación activa por el bebé que trabaja en el tejido de la mama con la lengua y la mandíbula para recibir leche.
Cuanto más un bebé se alimenta del pecho, más se producirá leche. La madre tiene que llevar el bebé al pecho a menudo para que su producción de leche pueda mantenerse activa y capaz de satisfacer las demandas de su bebé en crecimiento.