Algunos padres buscan tratamientos alternativos para los distintos padecimientos infantiles que no resulten tan agresivos para el bienestar de lo más pequeños. Cada vez más las personas se acercan a la medicina alternativa con el propósito de asegurar la salud sin peligros en los niños. Y la homeopatía representa una de esas terapias alternativas de gran eficacia y seguridad.
Sin que esto afecte la asistencia a la medicina tradicional para que los niños reciban un seguimiento por parte del pediatra, existen algunos trastornos, molestias o patologías infantiles que es posible tratar desde la homeopatía. En el caso de que un niño no logre conciliar el sueño o presente dificultades para dormir, puedes ensayar con algún remedio homeopático para asegurar su reposo en las noches y el de toda la familia.
Medicinas homeopáticas para conseguir que el niño duerma
El insomnio o las dificultades para conciliar el sueño no es algo exclusivo de los adultos. Algunos bebés posiblemente pueden durar meses sin dormir de forma adecuada, con el efecto de desgaste para ellos y para toda la familia. Por su lado, los niños también sufren algunos trastornos del sueño o dificultades que les impiden dormir bien, como las pesadillas nocturnas, la enuresis o el sonambulismo.
La homeopatía es una medicina alternativa que ayuda a los niños a conseguir ese reposo nocturno que requieren para comenzar el día llenos de energía. El Lycopodim se recomienda para esos miedos de los niños que les dificultan descansar en cuanto se quedan solos en la habitación. El Medorrhinum está especialmente sugerido para esos niños que no logran agotarse y llegan en la noche tan activos que se les dificulta dormir. Y el Calcium carbonicum es un remedio ideal para contrarrestar los populares terrores nocturnos que tantos niños padecen.
Estas medicinas homeopáticas son solo algunas de las que los especialistas aconsejan para beneficiar el sueño infantil. Sin embargo, es necesario asistir a la consulta de un homeópata profesional para que investigue en el caso de cada niño en específico, así será más efectivo hallar el tratamiento más apropiado para cada situación.
¿Cuál es la clave para que los niños duerman bien?
Por más que las medicinas homeopáticas no posean efectos secundarios y no representen un peligro para la salud de los pequeños, antes de recurrir a ninguna clase de medicina, ni tradicional, ni alternativa, es importante revisar las razones por las que nuestros hijos no logran conciliar el sueño, porque a lo mejor su inconveniente de insomnio se debe sencillamente a una falta de higiene del sueño.
La práctica del sueño es algo que también se aprende y, por lo tanto, es conveniente enseñar a lo niños a dormir. La higiene del sueño consiste en una serie de hábitos que nuestros niños deberían contemplar desde pequeños, como disminuir el ritmo de actividad de acuerdo se va aproximando la noche y ejecutar actividades de relajación que estimulen el sueño. Adquirir la costumbre de acostarse y levantarse siempre a la misma hora también es fundamental para normalizar el ciclo de sueño. Sin olvidar algo muy importante como es que los niños disfruten de un ambiente familiar tranquilo.